Artista de la cocina luso-venezolano es en la actualidad una verdadera sensación en
Estados Unidos. Se desempeña con maestría tanto en los postres como en el barismo, lo que le ha valido importantes reconocimientos. Apuesta por una verdadera aventura al paladar, bajo un concepto de sincretismo gracias a sus orígenes familiares. Sorprende al público, además, por su interacción y trato auténtico hacia los comensales.
El chef pastelero luso-venezolano David Rodrigues es sinónimo de versatilidad y maestría en Estados Unidos (EEUU) pues ha demostrado en poco tiempo su dominio de las artes culinarias con una propuesta innovadora que delita a los paladares más exigentes. Su apuesta es un sincretismo
de sabores donde siempre están presentes sus orígenes familiares.
El café de alta calidad, los postres y panes representan la apuesta más importante que ha cautivado a los comensales en Florida, con una fórmula que se ha transformado en un hito diferenciador.
Rodrigues comparte con los comensales algunos de sus “secretos” y ofrece
consejos a quienes en casa quiere experimentar. No se celoso de lo que hace, sino que prefiere dar conocimiento y dejar al público algo más que un excelente platillo.
En el mundo del barismo demostró en noviembre de 2015 su talento al ganar una reconocida competencia en Macondo Coffee Roasters de Doral, en la que un jurado internacional evaluó espressos, cappuccinos y bebidas preparadas o personalizadas. Su certificado lo recibió en enero de 2018. Y es que el café es una de las grandes motivaciones de este creador para acercarse a quienes admiran sus creaciones y entablar una charla informal.
En el mundo de los dulces, David Rodrigues logra que volvamos a imaginar y creer en un mundo de postres ilimitado, donde se alcance una verdadera “experiencia sideral” que logre hacer realidad cualquier fantasía.
Para muestra nos ofrece Viaje al Océano, el primer bocadillo de este tipo para restaurante elegante. Se trata de una creación que lo retrotrae a su infancia, época en la que pescaba con su padre cerca de los botes en Portugal. Era un instante tradicional para comer chocolates y frutas a la vez. Por ello, Viaje al Océano, además de chocolate, combina peras semi rellenas al vino blanco, almendras tostadas, un gelato de toronjil y se sirve cubierto por un cristal que adentro tiene humo de canela. El comensal se conseguirá en su mesa con una suerte de almeja en una roca que lo sumergirá a las profundidades de mar. El incomparable universo gastronómico de David Rodrigues se puede disfrutar en Kuten Inclusive
Kitchen, en el 3507 NE 163rd St, North Miami Beach, FL 33160. Allí se especializa en dulces modernos con la nueva tendencia sin gluten. De esta forma, las personas intolerantes a esta proteína contenida en muchos cereales, como el trigo, podrán disfrutar por igual los manjares.
Su versátil maestría culinaria también deslumbra en el restaurante Brava, ubicado en el teatro del Miami Adrienne Arsht Center. Hablamos de un sitio exclusivo y elegante, al que solo se puede entrar con reservación. La puesta en escena es unamezcla de cocina italiana y americana, con las técnicas más depuradas de lo moderno o vanguardista. Son platos muy elegantes con toques clásicos y moleculares. Entre los proyectos a corto plazo de David Rodrigues está viajar a Europa unos meses para aprender un poco de su pastelería y técnicas, buscar nuevas ideas e inspiraciones. A mediano
plazo volverá a Miami y trabajará en el futuro restaurante Brad Kilgore Ember, donde pondrá su mayor esfuerzo para lograr una Estrella Michelin.
Texto, fotos cortesía de i-magen.com
